Sofía Solórzano: La Secretaria de Gobierno de Tafí Viejo denunció ante la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia los recientes abusos policiales. El testimonio fue recogido en Mediodías Taficeños (Dale FM 104.7). La Secretaria de Gobierno de la Municipalidad de Tafí Viejo, Sofía Solórzano, presentó una denuncia formal ante la Secretaría de Derechos Humanos de Tucumán tras un nuevo episodio de violencia institucional ejercida por efectivos de la policía provincial. La funcionaria dialogó con David Correa en el programa Mediodías Taficeños (Dale FM 104.7), donde relató con firmeza los pasos dados desde el Ejecutivo municipal y dejó en claro que el Estado local no será cómplice del silencio ni la impunidad.
Los hechos ocurrieron hace dos fines de semana, cuando un grupo de estudiantes secundarios —integrantes de la Fundación Juventud Activa— fue violentamente reprimido por la policía mientras realizaban una reunión informal tras una jornada solidaria. El registro en video del accionar policial, que se viralizó en redes, motivó la reacción inmediata de la comunidad y del municipio.
«Lo que vimos fue la irrupción de efectivos sin orden judicial en una propiedad privada, con uso de la fuerza contra menores de edad, dirigentes estudiantiles, que venían de cortar el pelo en los barrios junto a un grupo de peluqueros», explicó Solórzano.
Una respuesta con compromiso político y memoria generacional
La reacción de la joven funcionaria no es casual. Exdirigente estudiantil, Solórzano expresó su profunda preocupación por lo sucedido:
“A mí me dolió. Porque yo estuve de ese lado. Yo también fui una de esas jóvenes que hacía actividades solidarias. No puede ser que el mensaje para los chicos organizados sea el miedo”.
El municipio, en conjunto con el área legal y el fiscal municipal, presentó un escrito formal en la Secretaría de Derechos Humanos, solicitando que se investigue la legalidad del operativo, se determinen responsabilidades administrativas y, de ser necesario, se impulsen acciones penales contra los responsables.
Un patrón que se repite
Solórzano advirtió que estos episodios no son hechos aislados. Recordó otras situaciones recientes ocurridas en Villa Obrera, donde familiares de un paciente fallecido fueron reprimidos durante una protesta por atención médica deficiente, y denunció operativos en barrios populares con detenciones arbitrarias y sin orden judicial.
“Nosotros defendemos una política de seguridad, sí. Pero no a costa de los inocentes. No con violencia contra jóvenes que están comprometidos con su comunidad”.
Acompañamiento legal y contención a las víctimas
La Municipalidad ya articula con organizaciones de abogados de Derechos Humanos para asistir a las víctimas y a sus familias. La propia secretaria mantuvo contacto directo con los jóvenes agredidos, poniéndose a disposición para respaldarlos institucional y jurídicamente.
«Queremos que sepan que no están solos. Vamos a acompañarlos, y también a seguir adelante con las presentaciones para que esto no quede impune”, afirmó.
Una política de Estado: alentar, no reprimir
El mensaje final de Solórzano fue claro: no hay excusas partidarias ni religiosas que justifiquen el abuso de poder. Los jóvenes —sea cual sea su bandera— deben ser alentados a participar y a comprometerse.
“Esto le podría haber pasado a chicos de cualquier espacio. Hay iglesias que hacen actividades solidarias, agrupaciones sociales, culturales. Y todos merecen respeto. Como Estado tenemos que garantizar que puedan actuar en paz”.
La secretaria aseguró que desde la Municipalidad de Tafí Viejo se trabaja en la conformación de equipos para dar seguimiento a estas situaciones, incluso con el uso de herramientas legales como el hábeas corpus en casos de detenciones arbitrarias.
“La violencia institucional no puede naturalizarse. En Tafí Viejo, no lo vamos a permitir”.
