Un ejemplo de unidad y lealtad en el peronismo

Alejandro Sangenis destacó el diálogo entre Chahla y Manzur como un ejemplo de unidad y lealtad en el peronismo. “El peronismo necesita menos grietas y más gestos como este”, afirmó el dirigente tucumano.
El subsecretario de Gobierno de la Capital, Alejandro Sangenis, expresó su firme respaldo al diálogo abierto entre la intendenta de San Miguel de Tucumán, Rossana Chahla, y el senador nacional y exgobernador Juan Manzur, en un gesto que consideró ejemplar por su vocación de unidad y por la lealtad política que encarna.
Sangenis recordó que la actual jefa municipal no solo fue ministra de Salud durante la gestión de Manzur, sino también diputada nacional e intendenta, cargos a los que accedió con el acompañamiento político del exmandatario. “Rossana es una dirigente con experiencia, sensibilidad social y una profunda formación técnica. Pero sobre todo, es una mujer leal. Esa lealtad, que muchas veces escasea en la política de hoy, habla de su integridad y su compromiso con un proyecto colectivo”, expresó.
El dirigente también valoró el diálogo como herramienta política imprescindible en tiempos de incertidumbre. “No hay reconstrucción posible desde la fragmentación. El peronismo tiene que reencontrarse en sus raíces, que son la justicia social, la inclusión y la lealtad. La charla entre Chahla y Manzur va en esa dirección, y por eso hay que celebrarla”, afirmó.
Sangenis subrayó que la intendenta representa hoy una renovación responsable dentro del espacio peronista: “No se construye futuro negando la historia. Chahla lo entiende. Por eso no hay contradicción entre mirar adelante y tender puentes con quienes fueron parte de su trayectoria política”. Finalmente, remarcó que “la unidad del peronismo no es un eslogan, es una necesidad estratégica para sostener políticas públicas que defiendan a quienes más lo necesitan” y llamó a replicar ese tipo de gestos en toda la provincia.
El encuentro entre Chahla y Manzur, más allá de lo simbólico, refleja una voluntad compartida de poner por delante los intereses del pueblo antes que las diferencias personales. En un tiempo donde los consensos escasean, este gesto se convierte en una señal poderosa dentro del mapa político tucumano.