Arresto domiciliario en Tucumán para tres jugadores de Vélez acusados por abuso sexual
Ayer fue un día clave en la causa que investiga la denuncia de abuso sexual a cuatro jugadores de Vélez: Sebastián Sosa, José Florentín, Abiel Osorio y Braian Cufré. Es que, ya en el comienzo de este jueves, pasada la medianoche del miércoles, se determinó que Florentín, Osorio y Cufré recibirán arresto domiciliario en Tucumán con «dispositivos electrónicos de monitoreo» durante 90 días. Sosa, por su parte, quedará en libertad condicional hasta el juicio, previa caución de 50 millones de pesos.
Qué sucedió en la audiencia
En la audiencia de la tarde, trascendió la versión de la presencia en el lugar del episodio de un quinto futbolista de Vélez, sin que se diera un nombre en particular. Sin embargo, Ernesto Baaclini, abogado de Sosa, descartó totalmente esa hipótesis. Pasadas las 19, hubo un cuarto intermedio en la jornada.
La fiscala Eugenia María Posse mantuvo la imputación con la que se inició la causa. Pidió que se acuse a Cufré y a Florentín de autores de abuso sexual agravado por la participación de dos o más personas. El mismo cargo le endilgó a Sosa, pero como actor secundario. En tanto, solicitó que a Abiel Osorio se lo acuse de abuso sexual simple. Acto seguido, pidió la prisión preventiva de todos. Los abogados de la defensa expusieron los argumentos para rechazar ese pedido. Quedó todo en manos de la jueza.
Así, las acusaciones nombre por nombre quedarían de la siguiente manera:
Braian Cufré y José Florentín: abuso sexual con acceso carnal agravado por participación de dos o más personas en calidad de coautores. Tienen la expectativa de pena más alta, ya que podrían recibir de ocho a 20 años de prisión.
Sebastián Sosa: abuso sexual con acceso carnal agravado por la participación de dos o más personas en calidad de partícipe secundario.
Abiel Osorio: abuso sexual simple.
– ¿Cuándo y dónde ocurrió el episodio?
-En las primeras horas del 3 de marzo, la denunciante ingresó a la habitación 407 del hotel Hilton de Tucumán en la que se encontraba hospedado el futbolista Sebastián Sosa. El equipo que dirige Gustavo Quinteros había jugado el día anterior ante Atlético Tucumán por la Copa de la Liga.
-¿De qué se acusa a Sosa, Cufré, Florentín y Osorio?
La víctima, cuya identidad está preservada, declaró que se acercó al hotel para verse con el uruguayo, a quien habría conocido por mensajes en redes. Según su versión, cuando ingresó al cuarto, la denunciante descubrió que no solo la esperaba Sosa: también se encontraban los jugadores Braian Cufré, Abiel Osorio y José Ignacio Florentín. La mujer, periodista deportiva que había tomado contacto con Sosa a través de un chat por Instagram, contó que compartió «unas latas de cerveza» apenas arribó. También le ofrecieron fernet, pero, luego de tomar unos tragos, comenzó «a sentirse mal, muy mareada». En ese instante decidió recostarse sobre una de las camas. Según ella, se sentía adormecida y fue abusada sexualmente. Cuando logró recuperarse, pidió un auto y regresó a su domicilio.
– ¿Qué pasó con los acusados desde la denuncia?
Vélez los separó del plantel profesional, por lo que se entrenaron aparte. Solo Sosa se manifestó públicamente, a través de un mensaje de Instagram. «Repudio la violencia de cualquier tipo. Respeto la integridad física y sexual de toda persona. Confío en la rápida acción de la Justicia», afirmó el uruguayo. Este lunes, tras la detención, el club de Liniers anunció la suspensión del contrato de los cuatro, situación que sin dudas se sostendrá mientras estén privados de la libertad
– ¿Los acusados tienen el mismo abogado?
No. Baaclini y un colega uruguayo están con Sosa. Camilo Atim es el abogado de Florentín. José María Molina es el abogado de Cufré y Osorio. Según Molina, sus clientes aseguraron que no sucedió nada de lo que aseguró la denunciante.
-¿Por qué se detuvo a los cuatro implicados?
La determinación la tomó la fiscal María Eugenia Posse, de la Unidad contra los delitos contra la Integridad Sexual de Tucumán, tras escuchar la declaración de la víctima en Cámara Gesell. Si actuó de esa manera es porque considera que hay pruebas contundentes y los acusados pueden entorpecer la causa o darse a la fuga durante el proceso. Estarán por lo menos hasta el miércoles en la Brigada de Investigaciones, ubicada en avenida Sarmiento y Junín, cerca del microcentro de la ciudad. Es un lugar en el que suele haber pocos detenidos.
