“¿Me van a criticar porque quiero ayudar?”
En el final de su presentación ante la Comisión de Presupuesto, el secretario de Turismo respondió a las críticas hechas por los diputados de Unión por la Patria, aclarando porqué decidió sumarse al Gobierno.
Concluida la última tanda de preguntas de Unión por la Patria, el secretario de Turismo, Daniel Scioli, advirtió que durante la reunión se habían agitado algunas cuestiones políticas que él respondería al final. Entonces dispuso que sus funcionarios contestaran las preguntas y luego él haría una aclaración ante los cuestionamientos de sus excompañeros políticos.
Aclaró que no estaba apurado. “No soy hincha de River, soy hincha de Boca, no estoy mirando el partido”, dijo en referencia a la semifinal que para ese momento se aprestaba a disputar el equipo millonario por la Copa Libertadores. “Después voy a hacer una reflexión final política y personal, que los que me conocen hace muchos años, la van a entender muy bien… si actuamos todos con buena fe y memoria”.
Cuando llegó su momento, Scioli dijo: “Saben de mi temple, mi espíritu democrático, de ser respetuoso, de mi sentido de la responsabilidad y conocen mi historia también”.
Recordó que tiene 67 años, y que a esta altura de su vida política, “uno se plantea qué actitud tomar”. Respondió puntualmente a un cuestionamiento de la diputada Ana María Ianni, que había recordado cuando en el Senado le aprobaron su pliego de embajador. El reconoció que tenía la posibilidad de quedarse en Brasil, y resaltó las relaciones que había cultivado allí. “Me rompí el alma, recorrí medio Brasil, para solucionar tantos conflictos. Se batió el récord de exportaciones, salvamos el Mercosur…”.
“Tenía la posibilidad cierta de seguir allá”, recordó, remarcando que en dos horas Lula aprobó su postulación a continuar como embajador, “a pesar de que algunos de acá estaban poniendo cizaña”, reprochó.
Entonces hizo referencia a su relación de 25 años con Guillermo Francos, quien le ofreció en nombre de Javier Milei continuar como embajador. El, entusiasmado con la convocatoria hecha por el presidente Milei, de contar con gente en su equipo de cualquier procedencia, tenía dos caminos: “O la miro desde Brasil, o aporto mi experiencia”.
Recordó entonces la ley base del peronismo, que dice “primero la patria, después el movimiento y por último los hombres”, y sostuvo que “si veo que el país me necesita, ¿por qué no voy a ayudar?”.
Luego respondió a un cuestionamiento que le había hecho la diputada Florencia Carignano respecto de Aerolíneas Argentinas, y le aclaró que cuando se anunció el último paro, él mismo había llamado a los sindicalistas para decirles que ayudaran a su titular, Fabián Lombardo. Les dijo que este era “un momento muy sensible”. Y observó: “No da el país para tener una aerolínea que pierda lo que perdía (Aerolíneas Argentinas), como tampoco para tener un Previaje en el que se gastaron 900 millones de pesos. Cuando no da, no da…”.
Scioli dijo haber “rendido todas las materias en el peronismo, y ustedes saben muy bien cómo es la historia. Hice todo lo posible para acompañar dentro de mi espacio político, pero por qué no voy a ayudar… Si me van a criticar porque quiero ayudar… Todo lo que quieran, miren, con aciertos, con errores, la buena fe, la buena voluntad, la tengo. A veces, hasta en reuniones familiares lo tengo que explicar”.
“¿Me van a criticar porque tengo ganas de trabajar? Quiero ayudar, entendí el mensaje… Posiblemente ustedes no me entiendan y lo respeto. Pero prefiero quedarme con la conciencia tranquila y ayuda”, concluyó