21 trabajadores afectados por la delicada situación de la estación. La creciente incertidumbre entre los empleados se evidencia por la escasez de combustible, el aumento de deudas, la proliferación de rumores de cierre y la falta de respuestas por parte de la dirección.
La estación de servicio YPF 365, ubicada en la esquina de Vicente López y Planes y la Ruta Nacional 65 y administrada por Sergio Galván Rey, atraviesa en los últimos meses una situación crítica que mantiene en estado de angustia a sus 21 trabajadores. El personal describe la vivencia cotidiana como “la agonía de su empleo”, ante un cuadro operativo y laboral que se agravó progresivamente.
Las dificultades comenzaron por problemas internos que derivaron en la interrupción del expendio de nafta y gasoil. A esa falla se sumó posteriormente la suspensión del servicio de GNC, atribuida por empleados a deudas acumuladas. En la actualidad, el equipo concurre al puesto de trabajo para cumplir horarios, pero no registra ventas ni clientes; la playa de la estación permanece desolada y el full shop luce prácticamente vacío, según afirma el sitio local Vientos Tucumanos.
Además del colapso operativo, los trabajadores enfrentan serias incertidumbres laborales. Denuncian que no se efectuó el pago correspondiente al sábado pasado, que continúa adeudándose el salario de noviembre y que no habría certezas respecto del aguinaldo. Señalan, asimismo, que el esquema de cobro pasó de semanal a quincenal sin definiciones claras, lo que agrava la precariedad económica de las familias afectadas.
El clima interno también se ha deteriorado por la falta de canales de diálogo. Según los empleados, el nuevo encargado no responde ni mantiene comunicación con el personal, lo que profundiza el malestar y alimenta la preocupación por un eventual cierre abrupto del establecimiento sin previo aviso.
En paralelo, comenzaron a circular versiones de interés por la estación por parte de una empresa del sur tucumano, vinculada también a la bandera YPF. Hasta el momento no existe confirmación oficial sobre una posible venta o transferencia de la concesión.
Las 21 familias vinculadas a la estación esperan una solución urgente que permita preservar sus puestos y reactivar la operatoria. Algunos trabajadores expresan la esperanza de un “milagro de Navidad” que revierta la situación, mientras desde la comunidad laboral se demanda información clara y medidas concretas para garantizar el cobro de salarios y la continuidad del servicio.
FUENTE; LOS PRIMEROS




