LEGISLATURA DE TUCUMANLocales

El proyecto para cobrar peaje en las rutas tucumanas

En medio de un encendido debate legislativo, el proyecto de ley presentado por el oficialista Tulio Caponio para implementar el cobro de peajes en rutas provinciales administradas por la Dirección Provincial de Vialidad (DPV) generó una fuerte controversia entre el oficialismo y la oposición tucumana. 
Mientras el bloque justicialista sostiene que la medida es necesaria para garantizar la seguridad vial y el mantenimiento de la infraestructura, desde distintos sectores opositores la iniciativa fue calificada como un intento de aplicar una doble imposición sobre los contribuyentes.

El legislador Caponio, presidente de la comisión de Obras Públicas y Servicios, defendió el proyecto afirmando que “no es una privatización ni un negocio”, sino una herramienta para financiar el mantenimiento de rutas claves para la producción y el turismo de Tucumán, en un contexto de recortes por parte del Gobierno nacional. “Sabemos que Vialidad hoy no cuenta con fondos suficientes para mantener las rutas como corresponde”, explicó. Y agregó: “esto beneficia a todos: al sector productivo, al transporte y a los ciudadanos en general”.

La propuesta contempla que la recaudación de los peajes sea administrada exclusivamente por la DPV, sin posibilidad de privatización, y que los fondos se destinen a obras de infraestructura vial. También se exime del pago a vehículos oficiales y de emergencia. El valor de los peajes se establecería según tipo de vehículo, cantidad de ejes, peso de carga y franja horaria.

Desde la oposición, las críticas no se hicieron esperar. Ricardo Bussi, líder de Fuerza Republicana, afirmó que el proyecto “es un nuevo impuesto encubierto” y “una muestra más del fracaso del modelo fiscal del peronismo tucumano”. Sostuvo que los productores ya enfrentan una de las mayores cargas impositivas del país y que el mantenimiento de las rutas debería cubrirse con los tributos actuales, sin imponer nuevas cargas a los ciudadanos.

El radical José Seleme (Avanza Tucumán) fue aún más tajante: “parece un chiste de mal gusto”. Cuestionó la transparencia en la administración pública y advirtió que si el Estado no puede garantizar rutas en condiciones hoy, “nada asegura que lo hagan después de empezar a cobrar”.

Desde el espacio CREO, la diputada nacional Paula Omodeo y el dirigente Sebastián Murga también manifestaron su rechazo a la iniciativa. Omodeo exigió explicaciones sobre el uso de los fondos públicos y denunció que “los recursos se destinan a mantener estructuras políticas inútiles y clientelismo”. Murga, en tanto, calificó el proyecto como “un nuevo intento del oficialismo de seguir sacándole plata a los tucumanos”.

“En CREO estamos convencidos de que Tucumán no necesita peajes, sino un gobierno que administre bien. La plata está, lo que falta es honestidad y voluntad de hacer las cosas bien”, sentenció.

El proyecto, que también cuenta con el respaldo de los legisladores Carlos GalliaSandra FigueroaLeopoldo Rodríguez (h) y Roberto Moreno, promete desatar una fuerte discusión parlamentaria. Mientras el oficialismo busca alternativas para financiar obras en un contexto de crisis fiscal y falta de fondos nacionales, la oposición acusa al Gobierno provincial de no administrar con eficiencia y de trasladar el costo de esa ineficiencia a la ciudadanía.

En los próximos días, se espera que el tratamiento en comisión abra un nuevo capítulo de la discusión política en Tucumán, con un eje claro: ¿peajes para mantener las rutas o un nuevo impuesto injustificado para los tucumanos?

Publicaciones relacionadas

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Botón volver arriba